En anteriores artículos hablamos de las obligaciones laborales importantes para no olvidar en el día a día en la farmacia. Hoy vamos a hablar de un punto importante, que es la prevención de riesgos laborales en la farmacia.
La farmacia, como cualquier otro centro de trabajo, en el momento de tener trabajadores a su cargo debe cumplir obligatoriamente con la Ley de prevención de riesgos laborales. La puede llevar directamente el propio farmacéutico, si está preparado para ello, o la puede contratar por cuenta ajena con un servicio especializado en Prevención de riesgos laborales.
El artículo 15 de la Ley de Prevención de Riesgos laborales (LPRL) insta al farmacéutico a aplicar las medidas que integran el deber de prevención con arreglo a los siguientes principios:
- Evitar los riesgos.
- Evaluar los riesgos que no se puedan evitar.
- Combatir los riesgos en su origen.
- Adaptar el trabajo a la persona.
- Tener en cuenta la evolución de la técnica.
- Sustituir lo peligroso por lo que entrañe poco o ningún peligro.
- Planificar la prevención.
- Adoptar medidas que antepongan la protección colectiva a la individual.
- Dar las debidas instrucciones a los trabajadores.
- Mantener despejadas las zonas de paso.
- Evitar que hay objetos o cables por el suelo.
- Eliminar la suciedad que puedan provocar resbalones y mantener el suelo seco.
- Señalizar las diferencias de nivel del suelo.
- Falta de iluminación, suelos irregulares, etc.
- Utilizar siempre escaleras de mano con peldaños antideslizantes. Subir y bajar siempre de frente a la escalera, revisarla antes de su uso.
- Mantener las escaleras limpias y en buen estado.
- Cubrir los huecos en el suelo.
- Colocar barandillas donde pueda haber riesgo.
- Almacenamiento: Material mal colocado y fuera de alcance.
- Dejar las vías de paso libres.
- Recoger objetos cortantes o punzantes y guardarlos en zonas seguras.
- Anclar las estanterías correctamente a la pared.
- Colocar los objetos más usados a la altura del tronco y los más pesados en la parte inferior.
- No sobrecargar las estanterías y respetar la altura de almacenamiento.
- Mantener los equipos de trabajo en buenas condiciones.
- Regular la temperatura en niveles confortables entre 17ºC y 27ºC.
- Mantener la humedad entre un 30% y el 70%.
- Primar la luz natural sobre la artificial.
- Mantener un nivel de iluminación adecuado al trabajo a realizar, evitar deslumbramientos.
- Revisar periódicamente que se cumple con La Ley de Prevención de Riesgos Laborales.
- Facilitar y fomentar la formación específica en prevención de riesgos a la plantilla.
- Entregar los Equipos de Protección Individual (batas, guantes, mascarillas, etc.) según se estime en la evaluación de riesgos.
- Vigilancia de la salud. Realizar los reconocimientos médicos periódicos individuales a cada trabajador y trabajadora.
22 de junio de 2022
Álvaro González Arconada
Asesor laboral en Audifarma