Durante más de quince años hemos ayudado a más de 1500 farmacias fundamentalmente, así como a otras empresas, sanitarias o no, a cumplir la Ley Orgánica de Protección de Datos y su Reglamento de Desarrollo con una metodología establecida por la propia norma que era relativamente sencilla seguir, teniendo los suficientes conocimientos de la norma así como de su aplicación sectorial específica.
No obstante, desde hace años teníamos presente que esta normativa y, sobre todo los procesos establecidos debían ser sustancialmente modificados, fundamentalmente por el evidente desfase de la norma, generado por el desarrollo cada vez mayor de las nuevas tecnologías, la digitalización de los negocios, el ingente tratamiento de datos por parte de las empresas, el Big Data, el Marketing Digital, los dispositivos móviles, el enorme conocimiento de clientes con la información que conservan las empresas. Este desfase de la normativa no da respuesta al desarrollo de las nuevas tecnologías para proteger el derecho fundamental que es la protección de datos. La facilidad que presentan las nuevas tecnologías para relacionarnos tanto personal como profesionalmente con otros países, hacía más evidente la desarmonización de la normativa en los diferentes países, e incluso la “voz” de muchos ciudadanos que denunciaban la vulnerabilidad de sus derechos ha derivado en la necesidad de que Europa actuase y se produjera un cambio relevante del marco jurídico, con la redacción y publicación del Reglamento General de Protección de Datos.
Tras dos años analizando esta nueva norma y comunicando a nuestros clientes el cambio que se avecinaba, ya estamos en la recta final y estamos adecuando desde hace meses y ya sin más dilación la adaptación que ya tenían nuestros clientes a la LOPD al nuevo Reglamento Europeo.
Como es habitual cuando hay un cambio normativo, prolifera quien quiere sacar partido, basándose en asustar y trasladar informaciones contradictorias e incluso falsas. En este punto, es fundamental saber que la norma no exige un curso de formación obligatorio para los responsables de los tratamientos (ni siquiera es obligatorio para el Delegado de Protección de Datos) ni mucho menos con una entidad específica. Es fundamental que para el efectivo cumplimiento de la norma se cuente con asesores y consultores expertos, fiables y serios que no nos dejen tirados a la mínima o que nos arriesguen a tener una sanción tan importante como las que ahora se aplican en el incumplimiento de la norma.
Verónica García Doylataguerra
Responsable departamento jurídico Audifarma